La prohibición de los anuncios de comida rápida en los programa infantiles, podría reducir en un 18% el número de niños con sobrepeso en EEUU, y reducir en un 14% el de adolescentes con sobrepeso. Esta es la conclusión a la que han llegado un grupo de investigadores en un reciente estudio.
Los investigadores han usado diversos modelos estadísticos para relacionar las tasas de obesidad con el tiempo de visionado de anuncios de comida rápida, encontrando que a mayor número de anuncios de comida rápida en televisión, mayor es el riesgo de obesidad en los niños.
Pero las estimaciones de los investigadores se basan en información recogida a finales de los 90, según un portavoz del Council of Better Business Bureaus. Desde entonces, dos de las principales cadenas de comida rápida, Burger King y McDonald’s y más de una docena de compañías de comida empaquetada, han firmado un acuerdo para intentar anunciar solo sus productos más saludables a los niños menores de 12 años.
Como resultado, Burger King y McDonald’s emiten anuncios para niños donde publicitan comida más saludable como palitos de manzana y leche desnatada.
Solo tres países (Suecia, Noruega y Finlandia) han prohibido patrocinar programas infantiles con anuncios de comida rápida para niños.