
Los investigadores han usado diversos modelos estadísticos para relacionar las tasas de obesidad con el tiempo de visionado de anuncios de comida rápida, encontrando que a mayor número de anuncios de comida rápida en televisión, mayor es el riesgo de obesidad en los niños.
Pero las estimaciones de los investigadores se basan en información recogida a finales de los 90, según un portavoz del Council of Better Business Bureaus. Desde entonces, dos de las principales cadenas de comida rápida, Burger King y McDonald’s y más de una docena de compañías de comida empaquetada, han firmado un acuerdo para intentar anunciar solo sus productos más saludables a los niños menores de 12 años.
Como resultado, Burger King y McDonald’s emiten anuncios para niños donde publicitan comida más saludable como palitos de manzana y leche desnatada.
Solo tres países (Suecia, Noruega y Finlandia) han prohibido patrocinar programas infantiles con anuncios de comida rápida para niños.