Una nueva tecnología inspirada en el ojo humano podría impulsar la fotografía digital produciendo mejores imágenes con un mayor campo de visión.
Varios investigadores han colaborado para crear un panel de detectores de silicio y un sistema electrónico que se pueden acomodar en una superficie curva. Al igual que el ojo humano, la superficie curva puede actuar como el plano focal de una cámara.
En una cámara normal, la electrónica debe estar sobre una superficie recta, y el sistema de lentes de la cámara debe reflejar una imagen varias veces antes de que ésta se pueda mostrar sobre los puntos correctos en el plano focal.
Los diseñadores ópticos conocen desde hace mucho tiempo las ventajas de la obtención de imágenes mediante una superficie de detección curva. Ésta es la forma en que funciona el ojo humano, utilizando la superficie curvada del fondo del ojo para capturar una imagen.
La cuestión es cómo colocar exactamente esta electrónica en una superficie curva. Lo común es que la electrónica esté situada sobre obleas de silicio, las cuales sólo se pueden comprimir un 1 por ciento antes de que se rompan y fallen. Los científicos han establecido métodos experimentales y fundamentos teóricos para una manera efectiva de transferir la electrónica de una superficie plana a una superficie curva.
Las primeras imágenes obtenidas utilizando este panel curvo en una cámara electrónica que emula el diseño del ojo humano, ya indican que las fotografías son mucho más nítidas que las obtenidas con cámaras similares pero planas, cuando se utiliza una óptica simple de obtención de imágenes.